domingo, 22 de marzo de 2015

El amigo informático.

La informática es una parte importante de mi vida, es mi trabajo y es un hobby y una herramienta para otras actividades lúdicas. No obstante, esto de ser el amigo informático a veces lo llevo mal. Hay semanas, como ésta última, en las que recibo 7 u 8 peticiones de ayuda informática de lo más diversa, y no tengo tiempo ni ganas de responder a muchas de ellas. Algunas cosas ni siquiera tengo el conocimiento para resolverlas. No todo lo que tiene un cable o una batería es algo que controlo al 100%.

En algunas ocasiones esto ha sido fuente de conflictos, hasta el punto de que hay gente que solo contacta conmigo cuando tiene un problema (si, algunos le echan mucha jeta). En más de una ocasión, después de molestarme en buscar una solución, la persona solicitante ya se había buscado otra... No voy a abundar en la variedad de casos que he tenido, o contar como muchas veces das la mano y te toman el brazo.

Por todo esto y porque prefiero que la gente me llame para tomar unas cervezas o ir a dar una vuelta o, simplemente, para ver que tal estamos, creo sinceramente que debéis acudir a la ayuda de profesionales para todos vuestros problemas informáticos. Es más, os pido que lo hagáis porque es lo que procede, ni siquiera deseo tener que decir que no.

A pesar de lo impopular que resultará este post para algunos amigos, creo sinceramente que dejar claro este tema mejorará la relación. Y si no es así, igual es que no merecía la pena.

miércoles, 18 de marzo de 2015

Retropie, Matamarcianos y Raspberry Pi 2.

Para un fan de los videojuegos clásicos de los primeros 80, pero sin espacio físico en casa para meter una máquina recreativa completa, existía una solución bien fácil, los joysticks/minicabina de matamarcianos.es, o "maquinitas" para tablet como les llaman ellos. La idea es bien sencilla, adaptan una placa de teclado USB (eliminando la necesidad de controladores) a los botones y palanca de toda la vida de los arcade, bien robustos para aporrearlos a gusto, y darle una forma y aspecto como las cabinas clásicas. Y bien hechas que están,... conectas a la tablet, arrancas el emulador y ¡a jugar!

Lo de usar una tablet está muy bien, pero mola mucho más tener un maquineto preparado de forma permanente y como, casualmente, acaban de sacar la Raspberry Pi 2, con más potencia, me decidí a pillar una para probar la famosa distribución RetroPie, un raspbian adaptado para ejecutar infinidad de emuladores, entre los que se encuentra MAME, por supuesto.

Pues oye, como la prueba fue exitosa (no como en mi primer intento hace un par de años), el siguiente paso era colocar una pantalla de 10,1" compatible con la Raspberry (que encontré en dx.com). Así que me he puesto en plan bricoman. Y, a pesar de mi nula destreza con las manualidades, he tuneado la cabina como se muestra:


Configuré los controles, probé cientos de ROMs y dejé solo una selección de las operativas (hay muchas que no van bien o yo no he sabido encontrar la versión correcta). Y ya tenemos el monstruito listo para enchufar, encender el interruptor, y en apenas medio minuto, listos para defender la tierra de los invasores, auyentar a los fantasmas del castillo, pulverizar asteroides en la galaxia o salvar a la chica.

¡Vivan los pixels!